Una educación de calidad para todos continúa configurándose como un derecho fundamental, como la base del desarrollo de la sociedad de conocimiento y como el medio privilegiado para potenciar el desarrollo del talento y el emprendimiento social. Como señala EURYDICE (2014) muchos de los problemas que se identifican hacen referencia a la educación recibida en períodos anteriores a la universidad. Se constatan diversos problemas centrales sobre la formación de los profesionales de la educación y los impedimentos que muchos estudiantes tienen para acceder y finalizar con éxito sus estudios universitarios.
Organismos como UNESCO, OCDE, OEI, OEA y MERCOSUR han impulsado estudios, investigaciones, reuniones y publicaciones sobre la formación inicial docente. Asimismo, Las Metas Educativas 2021, adoptadas en 2008 por los Ministros de Educación Iberoamericanos, establecen como meta general “Fortalecer la profesión docente” y como metas específicas: “mejorar la formación inicial del profesorado de primaria y secundaria” y “favorecer la capacitación continua y el desarrollo de la carrera profesional docente”.